dijous, de juny 07, 2007

Mi mujer dice (II)...

A mi mujer le gustaría tener clase. Yo creo que la tiene y mucha. Lo que también tiene es una empanada mental con el concepto “tener clase”. Ella lo confunde en ocasiones con el concepto “ser de clase”. Esto es, el icono de rubia con mechas y traje chaqueta de Armani, hijos matriculados en el Sant Peter´s School, marido engominado con Audi 6 y MBA del IESE, con cargo en alguna multinacional con disponibilidad para viajar, padres con chalet en Las Rozas y suegros con casa en Pals.
No te confundas, Sue Ellen. La clase es otra cosa. Es ser honesto, solidario, educado,... Yo te querré igual si no te conoce el maître del Via Véneto o la jefa de tienda de Max Mara. Espero que tú también.