dijous, d’agost 09, 2007

Que tremoli l'enemic

Tradicionalmente las llamadas "mujeres de..." han sido políticamente y/o socialmente mucho más activas que los llamados "esposos de...". Esto es, Ana Botella ha sido elevada a la categoría de consejera del Ayuntamiento de Madrid (quizás como parapeto de un sagaz Gallardón), Mercedes Romero fue diputada por Cádiz en la era de esplendor de Felipe González, Marta Ferrusola ejerció de primera dama in pectore del eterno Jordi Pujol, a imagen y semejanza de Evita Perón, esposa, claro está, del tal Juan Domingo. Por no hablar de la eterna esperanza blanca, y más den tiempos de Obama, Hillary Clinton, esposa del ocho años presidente de los EE.UU.

En sentido contrario, las dirigentas del mundo mundial se han caracterizado por tener maridos inanes, insípidos, prescindibles. Así, podríamos preguntarnos, sin encontrar respuesta, a que dedican el tiempo libre los esposos de Margaret Thatcher, Esperanza Aguirre, Mª Teresa Fernández de la Vega, Pilar Rahola,... seguro que a la política, utilizando el rebufo de sus parejas, no.

La excepción a la regla la encontramos en la Plaça Sant Jaume:
  • Lado montaña, sector Generalitat de Catalonia, Joan Saura.
  • Lado mar, sector Ajuntament de Barcelona, Inma Mayol.
Son la ecuación perfecta, la cuadratura del círculo,... son Isabel y Fernando, son el Xoan y la Inma. La pareja política que tanto monta, monta tanto. La que desgobierna la Catalunya del apagón, de las rodalies de RENFE, del aeropuerto, de los atascos en las autopistas. La que aglutina todo el poder en Catalonia en estos momentos vacacionales de Pepe Montilla y Jordi Hereu.

¡¡¡Volved pronto!!!